Una serpiente no puede crecer sin desprenderse de su piel vieja. Un pollito no puede emerger de su cascarón sin romperlo. Un bebé no puede nacer sin salir del vientre de su madre. Estos procesos naturales tienen que suceder para traer cambios.
Todos tendrán lugar paso a paso. Nada puede detenerlos. Si el pollito no tuviera la fuerza necesaria para romper el cascarón, moriría.
Hay un tiempo adecuado para todo. Podemos intentar impedir los cambios porque nos sentimos seguros y a salvo donde estamos y preferimos estar dentro de lo que ya conocemos antes que movernos hacia lo desconocido; pero dentro de esos límites podemos sofocarnos y morirnos.
Debemos tratar de comprender y aceptar la necesidad de cambiar con todo lo que está ocurriendo ahora.
EXPANDAMOS NUESTRA CONSCIENCIA …
"NOSOTROS SOMOS LA RENOVACIÓN" "ELEVEMOS NUESTRA MENTE CON GRATITUD POR ESTOS CAMBIOS Y SEAMOS PARTE DE ELLOS"
Maria Soledad Piñeiro
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